Con las listas publicadas y la sorpresa de Omár Gutiérrez consumada, es menester hacer un análisis del resto de la lista. Los periodistas solemos fijarnos sólo en los cuatro primeros lugares. Ese es el árbol que tapa nuestro bosque. Pero cuando hacemos un estudio más profundo aparecen nombres que no suelen estar entre las tertulias mediáticas, pero que son interesantes de examinar.
Una de las figuras que emergió en la lista a diputados fue Analía Ruíz. Pocas personas deben ser tan difíciles de entrevistar como Analía, trabaja todo el día codo a codo con el Gobernador, Gerardo Morales, se levanta a las primeras horas de la mañana y se acuesta muy tarde. Siempre con el teléfono en la mano la directora de Gestión lee los mensajes y pedidos de la gente, gestiona, hace seguimiento de los expedientes. Encontrarla desocupada es casi imposible.
Analía no es una outsider de la política. Viene de una familia de militancia de padres dirigentes barriales. Su papá fue presidente de centro vecinal y presidente de la Federación de centros vecinales. Su mamá fue enfermera, presidenta de la Asociación de Auxiliares de Enfermería y llego a ser concejal.
Sus papás fallecieron, ella es soltera no tiene sin hijos. Tiene cinco hermanos, tres varones y dos mujeres (una de ellas falleció siendo muy pequeña). Su vida está consagrada a Jujuy. Estudió ciencias políticas y aún tiene trunco el sueño de terminar la carrera. Pero eso no le evitó cambiar la vida de cientos de jujeños que llegaron hasta la puerta de su oficina o que la encontraron junto a Morales en el interior provincial.
Su militancia, propiamente dicha, se inició cuando era muy chica. “Cuando tenía 18 años comencé a caminar con el Gobernador tocando puertas y presentarlo fue en la primera candidatura de él como Gobernador”, cuenta entusiasmada. “Debido al contacto con la gente me gusto siempre el trabajo social”, remata lanzando una frase que la define, Analía es uno de los rostros más importantes del trabajo social en la provincia.
“Administrativamente trabaje en el concejo Deliberante luego en la época de la Rúa cuando el gobernador fue viceministro de desarrollo trabaje en la oficina de pensiones asistenciales y en posterior pase a la legislatura como asesora ahí aprendí el movimiento administrativo y proyectos de leyes. Mi trabajo militante y político social nunca dejo de ser mi eje porque aprendí a serlo desde muy chica”, refuerza la hoy candidata a diputada provincial.
“En el 2015 el gobernador me llamo para ser coordinadora de Gestión de la Gobernación y por mi desempeño en 2017 asumí la Dirección de Gestión hasta hoy. Mi trabajo se trata de resolver no sólo cuestiones cotidianas sino también acompañarlo al interior y/o actos. Tenemos una oficina de puertas abiertas y me encargo de derivar los pedidos que le llegan y tratar de resolver lo más que puedo los compromisos que asume en el interior”
En el ámbito nacional
Analía es una de las personas que mejor conoce, desde adentro, el cabildeo que vincula al Gobernador con el presidente, Alberto Fernández y a la hora de hablar del tema cuenta que tiene “noción de lo que el gobernador Gerardo Morales viene realizando porque estoy en las reuniones y audiencias que él tiene con la gente del interior. El trabajo que venimos haciendo es bastante amplio. A nivel Nación, Morales tiene muy buena aceptación de algunos y de otros no, pero tiene carácter y es un hombre multifacético que nos enseñó a lo largo de la vida a tocar puerta. Tiene buena relación con el presidente Alberto Fernández, con algunas áreas específicas y con otras no tanto, pero de alguna manera, él siempre trae una solución a la provincia”.
“En un análisis político, Nación se está perfilando el ejemplo que sigue Jujuy, esto de abrir Cauchari, energía, Canava, que es uno de los grandes hitos que tenemos en la provincia. El tema del litio. Desde el 2015, el gobernador abrió Jujuy al mundo y nosotros tenemos que continuar ese proceso, no podemos quedarnos estancados sino que estamos abriendo camino a una innovación productiva con la zona franca y con distintos proyectos que son como la bandera de Gerardo Morales”, señaló.
Una anécdota y un compromiso
Analía está en el puesto 14 de la lista, tiene una partida difícil En toda mi experiencia de salir y acompañar al gobernador por las distintas localidades, no obstante tiene claro que le gustaría hacer no sólo en la Cámara, sino en su vida política. “Aprendí que cada pueblo tiene sus características particulares de producción o cuentapropismo de acuerdo al ámbito donde está inserto. En la Puna, en La Quebrada, la gente aprendió distintas formas y modos de producción artesanal, no me voy a olvidar nunca de Lagunillas de Farallón en donde hacían adornos, aros, con el hueso de la llama, además hacen tejido y costuras. Admiro mucho el trabajo de las mujeres artesanas, de las familias de todo el interior. Mi compromiso es seguir trabajando y fortalecer el trabajo no solo político sino también social que venimos desarrollando en las distintas localidades”, concluyó.